en un sitio web me encontre este peculiar articulo en la cual comparan a los actuales sistemas operativos si fuesen comida.
Windows = Comida Rápida
• Es fácil de conseguir.
• Sirve para saciar el apetito, pero tiene carencias nutricionales.
• El usuario tiene muy poco control sobre la personalización de la comida (con queso, sin queso, con pepinillos, sin pepinillos y poco más).
• Las condiciones higiénicas y sanitarias de preparación (seguridad) son dudosas.
• La publicidad sobre el producto raramente refleja el producto real (prometen mucho más de lo que el comprador recibe al adquirirla).
• Siempre hay que pagar un poco más para obtener ciertos extras (bebida grande, extra de patatas, etc.).
• Aunque aparentemente existen muchas variedades de productos, al final, casi todas saben a lo mismo.
• Las hamburguesas dicen ser de carne, pero no tienes manera de comprobarlo.
• si algún plato te desagradó, estaba mal preparado y te sentó mal, no te explicarán qué pasó. Te dirán que en el nuevo menú de la carta ya no existe tal problema.
• Siempre se quejarán de la comida de otros restaurantes y dirán que la suya es mejor, pero ellos hacen las mismas hamburguesas de siempre.
• Los dueños de los restaurantes de comida rápida dicen ser filántropos, pero jamás regalarán su producto a menos que tengan un beneficio comercial en tal acción.
Mac = Comida Gourmet
• Es cara.
• La presentación es casi más importante que el producto en sí.
• El usuario no puede aderezar libremente la comida. Tiene que comerla como se la sirven y si cuestiona el sabor, generalmente se le tachará de tener mal gusto.
• Mucha gente la come no porque crea que es más sabrosa, sino porque al hacerlo aparenta ser un entendido culinario frente a sus amigos.
• Sólo la consigues en lugares exclusivos, donde cosas comunes que podrías conseguir en otros lados salen muchísimo más caras.
• Siempre innovando y reinventando, aunque a veces no por agradar al usuario, sino por mantener vivo el negocio.
• Te aseguran que está elaborado con lo mejor de lo mejor, pero no te dejan entrar a la cocina a ver cómo lo hacen.
• Si algún plato te desagradó, estaba mal preparado o te sentó mal, no te explicarán qué pasó, aunque te regalarán un descuento para tu próxima comida.
• Para ellos, la comida que se hace en otros lados es de mala calidad, aunque no la hayan probado nunca o alguna vez usen sus recetas en sus propios platos.
• El Gourmet se acercará como una persona sencilla, cercana y espontánea, pero apenas empiece a hablar de sus cosas, te darás cuenta que está en un nivel que no te puedes permitir. Sencillamente lo hace por que es bueno para la imagen de su negocio.
Linux = Comida Casera
• Siempre estuvo ahí, no se inventó por negocio, sino por necesidad y por placer.
• Se ajusta a todos los bolsillos, puede ser barata, cara o incluso gratuita. • Se cuida la presentación, pero lo importante es la comida.
• Puedes compartir las recetas con tus amigos. No hay secretos.
• La puedes hacer tú, un amigo, o puedes recurrir a restaurantes de comida casera, hasta te la pueden llevar a casa o hacértela por encargo.
• A veces se te puede quemar, pero a la próxima ya sabes cómo evitarlo y te saldrá cada vez mejor.
• Puede ser jugosa a la vez que muy nutritiva, y la puedes combinar con otros platos.
• Si la compartes con alguien que la necesita, no vendrá un empleado a decir que tu invitado que no paga no tiene derecho a estar en el restaurante.
• No hace falta sacarle fotos y disfrazarla para que se vea apetitosa. Lo que ves es lo que obtienes.
• Para toda la gente, para todas las ocasiones. Hay recetas sencillas y elaboradas, platos para matar el “gusanillo” y para “hincharte a comer”.
• Existe una variedad inmensa de recetas, y las puedes usar y modificar a tu antojo.
• Los demás cocineros son gente como tú, puedes hablar cara a cara con ellos, sencillamente por que les gusta lo que hacen, les encanta la cocina.
• Aunque por la calle y en la televisión se ve mucha gente yendo a restaurantes de comida rápida y de comida gourmet, hay mucha más gente de la que imaginas que cocina en casa.
• Los utensilios y productos que necesitarás para prepararla están disponibles en cualquier tienda, o incluso puedes utilizar utensilios caseros y antiguos que tengas en casa.
• Una vez que la tienes servida en tu plato, lista para comerla, te darás cuenta que nada de lo que puedas comprar por ahí se compara con tu propia comida casera, preparada a tu gusto.
La Ventana