Probablemente ya tendrás Apache correctamente instalado si lo has seleccionado durante la instalación del sistema. Para ponerlo en marcha, desde la consola y con privilegios de root, teclea
httpd. Con esto debería bastar para arrancar el servidor, y ya podrías comprobar desde cualquier navegador si está en marcha, simplemente tecleando en la barra de direcciones
http://localhost
Una vez tengas Apache en funcionamiento, podrás detenerlo desde la consola con
apachectl -k stop, y podrás volverlo a arrancar mediante
apachectl -k restart. Por defecto, encontrarás los archivos de la web que estás publicando en
/var/www/html; sustituye los archivos que encuentres por tu web, y listo, ya puedes disfrutar de tu servidor Apache en Linux.
Si además quieres usar PHP, lee
esto.