Tendrías la misma sensación si hubieras empezado a esquiar, a construir violines, a hablar alemán, a dibujar, a tallar madera, a pronosticar el tiempo... a aprender la disciplina que sea.
Lo normal es que avances poco a poco. Si perseveras, lo que haces hoy con esfuerzo te parecerá trivial y ramplón dentro de un mes.
Como dijo Salomón, "es de hombres sabios acumular en verano", y esto vale también para acumular conocimientos
Ánimo y saludos.