¿Tomás café? ¿Una cocacola de vez en cuando? ¿unas pipas? ¿algún caramelo o chicle? ¿Unas palomitas?
Pues el hosting te va a costar más o menos tomarte un par de cafés... al mes... o menos...
Y ya si sales de cervecitas con los amigos ni te cuento: una cervecita al mes y ya tienes hosting.