La compañía SCO intensifica sus descargos contra IBM y Linux, en una campaña judicial que podría amenazar seriamente la continuidad del sistema operativo de Linus Torvalds.
SCO, anteriormente conocido como Caldera, asegura que porciones considerables del código fuente de Linux han sido copiadas línea por línea de código UNIX sobre el cual tiene derechos reservados.
En marzo pasado, SCO demandó a IBM por apropiación ilícita de código UNIX . En esta oportunidad, la compañía va aún más lejos, al señalar que el propio fundamento de Linux está basado en un simple robo.
En un artículo en la publicación en línea News.com, Darl McBride, gerente de SCO, asegura que su compañía ha detectado casos en que el código de Linux ha sido copiado línea por línea del código UnixWare, del que ahora SCO es propietaria como resultado de un complejo proceso de cesión de derechos.
Ante el requerimiento de identificar porciones concretas de código, y así probar sus afirmaciones, McBride señaló que sería improcedente, debido a que de esa forma se ayudaría a los desarrolladores de Linux a borrar pruebas mediante la eliminación del código supuestamente plagiado.
Si SCO tiene éxito con su querella contra IBM, una gran cantidad de software Linux podría desaparecer. Parte del fundamento de Linux está basado en un modelo de confianza, entre desarrolladores y usuarios. Si quedara comprobado que desarrolladores de Linux han vulnerado esta confianza al incorporar código plagiado, Linux rápidamente dejaría de ser una alternativa viable para muchas empresas y entidades públicas.
IBM, por su parte, respondió formalmente el 1ro. de mayo el requerimiento presentado por SCO en marzo pasado. En el documento, IBM señala que no se han vulnerado los secretos de negocios de SCO, que las reglas de la libre competencia tampoco han sido violadas y que este tampoco ha sido el caso para los contratos específicos entre IBM y SCO, en particular los relacionados con la variante Linux propia de IBM, conocida como AIX.
Fuente:
Diarioti