El tema es que prohibir a los buscadores listar páginas sin el consentimiento expreso de sus dueños, implicará a la práctica prohibir a los webmasters incluir sus sitios en los buscadores sin tener que rellenar mucho papeleo y dar sus datos (de algún modo habrá que verificar que quien envía una web es su dueño).
En definitiva, esto serviría para barrer del mapa a todos los sitios no profesionales y, en definitiva, a "privatizar" Internet de modo que sólo los grandes tengan presencia