Ni siquiera hace falta que tope con alguien con un abogado, sino que caiga en un malentendido con alguna persona, se haga merecedor de envidia por parte de algún vecino (físico o virtual), realice algún comentario en Internet o fuera de él que atraiga la atención de algún resentido o maniático, para que se notifique una denuncia a, por ejemplo la Agencia Española de Protección de Datos, con consecuencias ciertamente complicadas de afrontar para alguien que, de entrada, busca la máxima economía en sus planteamientos.
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https://www.agpd.es/portalwebAGPD/ca...ides-idphp.php)