La verdad es que es una lástima que algunas empresas, haciendo uso de su poder económico, puedan vetar la libertad de expresión.
Recuerdo un caso muy sonado, una empresa llamada
Axpe Consulting intimidaba a un exempleado suyo llamado David Lozano a que retirase de inmediato los comentarios negativos que vertían en su blog o de lo contrario le azuzaban a sus abodados.
Al final, harto de tantas demandas y pleitos, David Lozano cedió a la presión de esa empresa y retiró los comentarios negativos que libremente y haciendo uso de la libertad de expresión, habían vertido los usuarios.
Pero el tiro les salió por la culata, y podeis imaginar por qué. Es imposible ponerle puertas al viento.