Mas historia de antes de 1090. Espero que la disfruteis como yo
En 1042 El rey de Sevilla Abu-I-Qasim murió y fue sucedido por su hijo al-Mutadid.
en 1043 El rey de Zaragoza Abú Ayyub derrotó y mató al rey de Toledo Ismaíl ibn Zennun, y ocupó su capital durante unas semanas, pero luego fue expulsado por su hijo al-Mamún, que se convirtió en el nuevo rey toledano. Entonces Abú Ayyub entabló una alianza con el conde Ramiro I de Aragón, que todavía aspiraba a ser reconocido como rey de Navarra frente a su hermano García IV Sánchez. Sin embargo la coalición fue vencida por el rey navarro en la batalla de Tafalla. Tras ella los dos hermanos llegaron a un acuerdo cuyos términos se desconocen, pero todo indica que el conde Ramiro I tuvo que reconocer la autoridad de su hermano, al menos formalmente.
Los obispos de Gerona y de Vich lograron que el conde Ramón Berenguer I de Barcelona se reconciliara con su abuela Ermessenda, lo que quiere decir que Ermessenda volvió a gobernar el condado sin discusión. Mir Geribert reconoció la autoridad de Ramón Berenguer I.
El reino de Denia pasó a manos de Iqbal al-Dawla, el hijo del rey Muyaid.
En 1045 En Badajoz murió el rey Ibn al-Aftas, y fue sucedido por su hijo Muhammad al-Muzafar.
En 1046 Ese año murió el rey de Zaragoza Sulayman ibn Muhammad y repartió su reino entre sus cuatro hijos, pero uno de ellos, Abú Yafar Ahmad al-Muqtadir, logró pronto la hegemonía. Al-Muqtadir, junto con su hermano al-Mudafar, que reinaba en Lérida, atacó al conde Armengol III de Urgel, pero el conde Ramón Berenger I de Barcelona acudió en su ayuda, derrotó a los musulmanes y les obligó a pagar unos impuestos anuales que fueron conocidos como parias. Poco después, el rey Fernando I de León obligó también a al-Muqtadir a que le pagase parias. Antaño habían sido los pequeños reinos cristianos los que habían tenido que pagar a los gobernadores musulmanes y ahora la situación se estaba invirtiendo.
En 1049 Mir Geribert volvió a levantarse contra el conde Ramón Berenguer I de Barcelona.
en 1052 El conde de Barcelona Ramón Berenguer I se casó en terceras nupcias con Almodis tras repudiar a su segunda esposa, Blanca, con la que se había casado un año antes (su primera esposa, Isabel, había muerto a su vez un año antes). Almodis influyó sobre su marido y ello suscitó un nuevo conflicto con Ermessenda, la abuela del conde, que apeló a un recurso que ya había empleado en tres ocasiones anteriores: se quejó a Roma de que su nieto la maltrataba y logró que éste fuera excomulgado (por cuarta vez). Mientras tanto Mir Geribert fue llevado ante un tribunal y obligado a reconocer la autoridad del conde de Barcelona, pero no hizo caso de la sentencia.
El rey de Sevilla al-Mutadid ambicionaba reunificar Al-Ándalus, y había logrado someter algunos señores bereberes vecinos. Mediante una trampa, asesinó ahora a los que le ofrecieron resistencia. Sin embargo, su mayor obstáculo seguía siendo el rey Badis de Granada.
En 1053 murió Abú Amr al-Dani, que escribió varios tratados sobre el modo de recitar el Corán, que aún son de uso corriente. Vivió en el reino de Denia
Los almorávides eran ya los dueños del Sahara y ahora ibn Yasín los dirigió más al norte, y así ocuparon los primeros oasis del actual Marruecos.
Al morir sin descendencia el príncipe de Viguera Fortún Sánchez, el reino se incorporó finalmente al reino de Navarra. El rey Fernando I de León y Castilla reclamaba ciertas tierras de Santander y La Rioja a su hermano García IV Sánchez de Navarra. El rey navarro se negó a entregárselas y Fernando I penetró en Navarra con un ejército. Aunque García IV Sánchez contaba con el apoyo de tropas gasconas y musulmanas, fue derrotado y muerto en la batalla de Atapuerca. Parte de los territorios reivindicados por Fernando I fueron incorporados a Castilla. En la propia batalla Fernando I hizo proclamar rey de Navarra al hijo del rey fallecido (su sobrino): Sancho IV Garcés, que tan sólo tenía quince años de edad. La historia pinta al nuevo rey como caprichoso e irascible, pero parece ser que sus tíos Fernando I de León y Castilla y Ramiro I, el conde de Aragón, supieron tratarlo en su propio provecho
En 1056 Los almorávides iniciaron la ocupación de un amplio territorio al sur de Marruecos
Un sínodo celebrado en Tolosa confirmó la excomunión contra el conde de Barcelona Ramón Berenguer I y su esposa Almodis. En 1057 el conde llegó a un acuerdo con su abuela Ermessenda, en virtud del cual le compraba todos los derechos sobre los condados de Barcelona, Gerona y Ausona a cambio de cien onzas de oro. Ermessenda se comprometía así mismo a hacer lo posible para que se anularan las cuatro excomuniones que ella misma había propiciado. Ermessenda se retiró a sus posesiones y murió al año siguiente.
Nuevamente, el conde Mir Geribert se sometió a Ramón Berenger I.
El rey Badis de Granada logró conquistar el Califato de Málaga a los Hammudíes.
El rey de Sevilla al-Mutadid desposeyó a los Hammudíes de su último reducto al tomar Algeciras.
El rey al-Muqtadir de Zaragoza conquistó el reino de Tortosa.
Los almorávides de Ibn Yasín ya eran los dueños del sur de Marruecos. Su base principal estaba en la ciudad de Agmat.
El conde Mir Geribert se trasladó a la corte del conde de Barcelona. Murió en
en 1060 junto a su hijo luchando contra los moros. En Tolosa murió el conde Poncio, el hijo de Guillermo III Tallaferro, y fue sucedido por su hijo Guillermo IV.
En 1060 El rey de Zaragoza al-Muqtadir rindió vasallaje a Fernando I de León y Castilla y aceptó pagarle parias, al igual que se las pagaba ya al conde de Barcelona.
El almorávide Ibn Yasín murió guerreando contra la tribu de los bargawatá, que no aceptaba la conversión por las buenas. Se produjeron varias intrigas en torno a la sucesión, en las cuales destacó la influencia de una mujer llamada Zaynab, que en 1061 logró finalmente que el poder pasara a su cuarto marido Yúsuf ibn Tasfin (Zaynab se había divorciado tres veces, según le había convenido).
En Valencia murió el rey Abd al-Aziz y fue sucedido por su hijo Abd al-Malik.