08/03/2006, 12:35
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lo vi claro... despeus de la siesta obligada por la excelencia de baccus, inspire el frio del norte y me puse manos a la obra. Mi ayudante Lucio me puso al dia de mi campaña al norte de italia. Los ejercitos galos seguian hostigando con gran dureza mis ciudades, sin dejar tiempo a la organizacion. Mis legiones se defendian con valor sin apenas tener tiempo a restablñecer las cohortes. Mis generales estaban aguantando firmemente, mietras des del sur, recien derrotado el primer ejercito rebelde, dos ejercitos de princeps y triari, marchaban y se reagrupaban alrededor de mi capital para reequiparse. Sus ordenes eran claras... cruzar los puentes del norte y eliminar los grandes ejercitos galos ahi apostados, mientras 3 ejercitos de asteros, velites i equites les seguian para aniquilar lo que quedara...
Lucio y mis dos mejores mensajeros esperaban ansiosos las ordenes. El sol ya cahia al oeste, iluminando mi coraza por la ventanilla de la tienda de campaña. El polvo lo cubria todo. Me incorpore y mi perro se sento, como si tambien esperara ordenes. Le acaricie. Mire hacia el norte... la nieve resplandecia en las montañas. a fuera las tropas estaban impacientes.
- Partimos... -
Al poco, el estandarte de la Xa Legion cruzava la empaladiza, hacia el norte, hacia la nieve, con el sol poniendose al oeste.
__________________ :: si vis pacem para bellum ::
_se puede caer, pero nunca ceder _ |