Esto sólo demuestra que Microsoft está abriendo los ojos ante un hecho clarísimo: ya no puede dormirse en los laureles. El Open Source en general (y Linux en particular) ya se han convertido en una amenaza a su dominio. Microsoft sólo está tomando las acciones necesarias para sobrevivir en el mercado.
Lo que más me llama la atención es que al menos dos de las licencias "abiertas" de Microsoft pueden perfectamente ser aprobadas como licencias libres, (casi) a la misma altura que la GPL u otras similares. Voy a tener que leerlas en más profundidad, pero de momento parece que no hay "letra pequeña"
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