LVM tiene muchas ventajas por sobre los métodos tradicionales de particionamiento; por ejemplo, es muy simple redimensionar una partición sin perder datos, o crear nuevas particiones.
En Google puedes encontrar mucha documentación, incluido este
HOWTO. Además, Fedora trae la herramienta system-config-lvm, que permite ver (NO modificar) la estructura de tus particiones LVM.