18/06/2005, 10:59
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| Colaborador | | Fecha de Ingreso: julio-2004 Ubicación: Guipúzcoa
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Antigüedad: 20 años, 5 meses Puntos: 76 | |
Sí, sí, lo sé, conozco bien Knoppix, y sé de sus grandes virtudes... tengo todas las versiones desde la 3.1, tanto en inglés como en castellano (aunque la 3.9, la última, aún no la tengo en castellano), y he leído algún que otro extracto del "Knoppix-hacks" (si se llama así, que yo tampoco lo recuerdo bien). Y me ha servido para recuperar más de un desastre, no sólo en mi equipo, sino también en el equipo de una amiga (tenia WinXP instalado, un virus le había fastidiado el sistema, y no sabía cómo recuperar los IMPORTANTÍSIMOS datos que guardaba en el disco duro; Knoppix triunfó). Yo no digo que tengo dos distros para poder salvarme del desastre, sólo digo que también sirve para eso. Sé que no es un motivo de peso, ya que existe Knoppix, por eso he dicho que supone una "ligera ventaja". Por ejemplo, con Knoppix por defecto no tienes acceso de escritura al disco duro, para ello tienes que desmontar y volver a montar la partición a la que quieres acceder; con una distro instalada en el disco duro ése es un paso que te puedes saltar. Además, con Knoppix en modo LiveCD el software que tienes a mano es limitado, por muy amplio que sea. En caso de necesitar algún programa en concreto que no se incluya en el CD (es difícil, porque el software que incluye es muy completito, pero no es imposible), instalarlo en la RAM es algo muy limitado. Más que nada porque tengo 256 MB de RAM, lo cual no es la octava maravilla del mundo.
O sea, que Knoppix es mucho Knoppix, y soy su primer defensor, he repartido varias copias de Knoppix entre mis colegas (y siempre he asumido yo el coste del CD-R). Pero ya que tengo un segundo sistema instalado en el disco duro, voy a aprovecharme de sus ventajas. Eso sí, no instalo un segundo sistema operativo para sustituir a Knoppix, sino por curiosidad. |